Las obras del metro de Málaga protegen los ficus de la Alameda

Estos árboles centenarios se han convertido en un símbolo urbano y han conquistado el corazón de los malagueños y los visitantes de la ciudad

La gestión de las obras de construcción del Metro de Málaga, en el tramo de Guadalmedina a Atarazanas, está siendo especialmente sensible con la riqueza patrimonial que define al entorno urbano de la Alameda Principal, tanto en el plano del seguimiento arqueológico como en la preservación de los ficus centenarios con alta carga simbólica para la ciudad.

El proyecto de construcción del metro en esta zona contemplaba una serie de medidas para evitar la afección a estos ficus de la Alameda, a partir de un estudio previo realizado por la Universidad de Málaga en el que se valoraba la vitalidad de los ficus situados en el lateral norte, por donde pasa el túnel del metro hacia su estación término de Atarazanas. Como consecuencia de este estudio, la construcción de las pantallas del túnel se ha separado un mínimo de siete metros del tronco de los árboles y la losa de cubierta del túnel se ha situado a algo más de cinco metros de profundidad respecto al nivel de calle, por debajo del nivel freático.

El conocimiento de la evolución histórica de estas especies arbóreas indica que el nivel freático de la Alameda no ha permitido a las raíces crecer en profundidad, y el desarrollo urbanístico de este viario, con diferentes fases de pavimentación y compactado del suelo a lo largo de la historia, ha impedido la penetración de oxígeno y agua, necesaria para el crecimiento normal de las raíces. Finalmente las obras del túnel del metro no han afectado a las raíces de los ficus, que han crecido de forma anómala desde su origen: las raíces no se han expandido de manera extensiva alrededor del tronco, sino que se han desarollado de manera limitado en forma de cepellón o bulbo.

En el momento de la ejecución e impermeabilización de la losa de cubierta del túnel, se ha empleado en la Alameda Principal una maquinaria especial de bajo gálibo debido a la presencia de los ficus, con el fin de minimizar la interferencia en la copa de los árboles.

ESTABILIZACIÓN DE LOS FICUS

Las obras de reurbanización de la zona norte de la Alameda Principal se están llevando a cabo en la actualidad y han incluído los trabajos de estabilización de los ficus centenarios que presentan más inclinación. En circunstancias normales y, en lo que se refiere a una obra de esta envergadura, que lleva implícita la excavación de un doble túnel para el tránsito soterrado de trenes y una estación subterránea en Atarazanas, lo más habitual habría sido sustituir los árboles existentes por otras especies una vez finalizadas las obras. Sin embargo y, debido a la importancia simbólica de los ficus, la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía, que gestiona la ejecución de las obras del metro, ha decidido llevar a cabo un “sistema de anclaje de tracción mediante micropilotes de inyección global única, atados con vigas de hormigón armado”, que mejorará la estabilidad de los árboles, y que fue consensuado con el Servicio de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Málaga.

El sistema de estabilización de los ficus en la Alameda Principal se ha implementado en aquellos árboles que, tras el seguimiento científico, requieren de un mayor refuerzo. Hay seis ficus que se encuentran muy inclinados o que, por su ubicación, están especialmente expuestos al viento. Antes de acometer la pavimentación de la zona, se ha construido un anclaje con micropilotes cuyo objetivo no es solo minimizar las potenciales deficiencias, sino generar un anclaje que aumente la seguridad de los ejemplares con el tiempo y reduzca el riesgo de vuelco de los árboles, aprovechando las obras de reurbanización de la avenida.

La ubicación de los micropilotes se ha determinado en cada árbol, una vez limpia la zona cercana al cuello y teniendo en cuenta la inclinación de cada ejemplar. El encepado sobre las raíces tiene la capacidad de carga suficiente para garantizar la estabilidad de los árboles. Además de los micropilotes, una viga pisa bastante superficie del árbol como para limitar un eventual movimientos de una manera eficiente.

De forma complementaria, se ha realizado una estabilización extra con puntales, de manera provisional mientras se están llevando a cabo las tareas de ejecución de micropilotes y vigas. Una vez ejecutadas las vigas se considera estabilizado, aunque los anclajes no se van a retirar hasta finalizar las tareas de hormigonado y urbanización alrededor de los árboles.